martes, 8 de junio de 2010

memoria

.
Con esta vergüenza que me inunda el alma
que recuerda todas las verdades dicen
de ayer que se pierde como un juego inútil
perder pero muertos son las mismas calles
la sangre dormida los alientos blandos
la cárcel el aire negro de mi patria
dormir pero sueño que yo sigo vivo
vivir destrozado con tanta mentira
jardín encendido agujas de hielo
qué se hizo del fuego cenizas de aquello
que fue dónde estamos la sed me robaron
pero mi garganta seca.

Ay, que se me rompe el alma.

35 comentarios:

Anonima Mente dijo...

se te rompe el alma al recordar?.
Precioso poema!

Rafael Arenas García dijo...

Pues venía a comentar una de esas apariciones/desapariciones que a veces ocurren en tu blog y la veo sustituida por esto tan diferente, tan inquietante. Me gusta, me gusta el verso largo, me gusta la ruptura progresiva de la gramática, me gustan las imágenes, me gusta ese último verso, que en su sencillez contrasta y realza todo lo anterior.
Tengo que volver a leerlo; pero como venía por aquí para comentar otra cosa no dejo pasar la ocasión de saludarte.
Un abrazo.

Manolo Jiménez dijo...

Recordar casi siempre suele romper el alma. Salvamos con la memoria selectiva y el poco tiempo que dedicamos a mirar atrás.

Abrazos.

Almayou dijo...

Los recuerdos amargos siempre secan la garganta.
Me gustó el final.
Besos.

Maria Sangüesa dijo...

Comparto todo cuanto dice tu poema, un poema muy bueno en el aspecto "técnico", pero dejo a un lado el cómo lo dices porque lo que me alcanza de lleno es lo que dices. Un abrazo.

jorge dijo...

Soy un especialista en filtrar recuerdos.

Y mantengo vivos los placidos.

Algun naufragio se cuela de vez en cuando, pero lo tapo fantaseando.

Perder los segundos es un juego util.

Prefiero no vivir dos -o mas- veces lo que no me gusta.

Malos recuerdos si te rompen el alma. Los que, como yo, tenemos el corazon de piedra; creo que tenemos el alma bastante protegida.

Te lo asegurare en cunto sepa que es.

jorge dijo...

explico: Perder los segundos sueños, los de naufragio (no me referia a los segundos/tiempo)

Marisa Peña dijo...

Y qué seríamos sin memoria, huesos, despojos de lo vivido sin cicatrices, sin huellas, sin sentido...
Un abrazo, admirado poeta

Jorge Torres Daudet dijo...

Estimado José; la memoria para algunos es selectiva o, simplemente, subjetiva; recuerda lo que cree vivió él, aunque nada tenga que ver con lo que realmente ocurrió. La memoria objetiva recrea, la otra crea, crea falsos héroes y falsos villanos.
Así a mucha gente se le puede romper el alma.
Es mejor mirar cara el futuro y construyamos lo que quisimos hubiera sido lo pasado.
Un abrazo.

José Luis dijo...

El alma, la vergüenza, el ritmo roto, la fatiga...Todo metido en coctelera (agitado, no movido) y servido al punto.
Interesante.

Jose Zúñiga dijo...

No tanto al recordad, anónima: al ver la autocomplaciencia de ciertas gentes con lo que está pasando. Como si no hubiéramos sabido lo que iba a pasar. La historia, no mi historia, eso es lo que recuerdo y me subleva.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Ah, Rafael, tu reader va a acabar con todos mis secretos!!!
Sí, ayer colgué una cosa escrita sobre la marcha y a medio hacer, así que me arrepentí. Ya llegará y ya me dirás, porque algo extraña era.
Si vuelves a leer esta "memoria" (que tal vez debería titularse "desmemoria"), piensa en la historia, no en mi historia. O piensa lo que quieras, bueno, el poema, como digo siempre, lo acaban los lectores.

Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

No voy a hablar ahora del materialismo histórico, Manolo, pero los tiros (incluso reales) por ahí van.
Lo que me rompe el alma es el olvido, no el recuerdo. La memoria, sí.

Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

La desmemoria seca el alma, la garganta y las ganas, psique, no hay que olvidar. En esta ocasión no hablo de mí. O sí, pero de mi yo en los otros, con los otros. De una historia que olvidamos y no puede ser.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Lo has entendido, María. Lo sé.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

No te creo, Jorge: no tienes el corazón de piedra y me juego un huevo. Los dos, no.
Los recuerdos para el que los quiera, no soy yo de recuerdos. Otra cosa es que no olvide y el presente se haga pasado de golpe. No sé si me explico.

Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Queda claro, Jorge: mirar al futuro. Siempre. No recordar recuerdos. No olvidar la historia tampoco, que (creo) es otra cosa.

Jose Zúñiga dijo...

Pues tú lo has dicho, Marisa. Y no sé si no estamos empezando a serlo.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

La memoria subjetiva son los recuerdos, Jorge. La objetiva es la historia, sea lo que esto sea. Es curioso, Jorge: hoy la mayoría de comentarios hablan de recuerdos, cuando yo aquí más bien estoy hablando de olvido. Cosas de la poesía. Este texto (cuya música tengo en la cabeza) debería acabar o repetirse o fragmentarse con un a modo de esribillo.

"Cómo, cuándo, qué,
dónde olvidé toda mi historia.
Hombre, más que fe
hay que tener memoria"

Creo que así queda más claro.

Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

El ritmo roto, sí, José Luis, algo bucado adrede para expresar algo que se rompió. Y sincopado, para expresar algo que me inquieta.
Abrazo.

Paloma Corrales dijo...

Pues a mí me transmite precisamente inquietud y descontento, incluso algo de cabreo. No creo que necesite aclaraciones; son los versos de alguien que no se conforma y no quiere conformarse.

Me gusta cuando protestas también o tan bien ;-)

Beso.

Anónimo dijo...

Pues amí se me ha roto de puro verso, de pura poesía enganchada a cada aliento que , gracias a dios, has impedido que llegue amis pulmones por la falta de puntuación, ¡sí señor!, ¡así sí!. da gloria haberlo leído, contenido y forma en un verbo en un suspiro, en un aliento. redondo inmenso.
Un besazo de felicitación, si me lo permites

Jose Zúñiga dijo...

Y aunque las nececesitara (aclaraciones) no sou partidario de darlas, Paloma. Hoy hice una excepción porque tal vez, al ser concebido de una forma no sé, musical, dio lugar al equívoco.
Cabreo y tristeza, sí.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

En un ¡ay!, Sofía.
Te lo permito, te lo agradezco y te beso.

Airama dijo...

la memoria también nos recuerda las veces que nos hemos equivocado y eso no nos gusta.
Bs

María Socorro Luis dijo...

De los muy buenos, Jose.
El como lo pones, es para que el lector se ejercite?... te digo por lo de maestro.

Ta muxus.

Jose Zúñiga dijo...

Dejémoslolo en simplemente, Emibel, me alegra que lo hayas visto así.
Bss

Jose Zúñiga dijo...

Y tanto, Airama. Pero peor aún cuando se hace patente que, pese a todo, nos seguimos equivocando. Espero que no me alcance el rayo de esta última equivocación colectiva.
Bss

Jose Zúñiga dijo...

Hoy no toca ejercicio, Soco... Y qué bien sabes de qué estamos hablado.
El como tal, salió tal cual.
Ta muxus,

VICTOR VERGARA dijo...

Este poema sí me gusta mucho, amigo JOSE. Me gusta más que cuando entonas como canción. Esa libertad de rima y ritmo da mucha veracidad a un sentimiento que oprime el corazón y a la garganta. Y es un sentir comunitario, un sentir de los demás. Es el sentir de gente que vivieron esperanzas rotas. Revoluciones rotas. Es el sentir de la poca gente lúcida que va quedando, de la gente que no vive dormida dentro de un sueño, o de una borrachera colectiva que aún perdura.

Al pronto se me vino la imagen como de estar sentado en un banco de cualquier paseo contigo, comentando sosegadamente el devenir del tránsito, lo que está ocurriéndo y lo que está por ocurrir.

Es cierto, empieza a abochornar vergüenza y el alma rota. Quizá tengamos que pasar por esto, y cosas peores, para que despierte la sangre y saquemos lo mejor de nosotros.

ABRAZO.

MarianGardi dijo...

El contenido es excelente, en mi opinión encuentro que le falta ritmo interno, eso que llaman musicalidad.
Es mi sincero pensamiento.
Busco más, algo debe tener que me guste

Jose Zúñiga dijo...

Sólo decirte, Víctor, que me encantaría que esa imagen sentados en un banco y conversando fuese algú día real. Todo lo que aqué dejas dicho es exactamente lo que quise decir.
También me parece excelente que tengas tus gustos, más libres en la forma que los míos tal vez. Digo tal vez porque aunque no lo parezca soy un tanto anárquico en mi escritura, sólo que me reprimo. Y, bueno, justo este poemilla (que es canción en realidad) tiene un ritmo muy marcado. Exagera los acentos al leer y lo verás.
Abrazo fuerte.

Jose Zúñiga dijo...

Pues te digo lo mismo que a Víctor, Marian: creo que son versos de doce sílabas. Si los partes en dos (o sea, los convierte en versos de seis sílabas) y lo lees en voz alta, el ritmo es machacón. Hasta excesivo.
Ya me dirás, si te apetecece.
Bs

Leonardo dijo...

¿Qué se hizo la sed? Es verdad. Vivimos tiempos de indiferencia, de borrón y cuenta nueva.
Está bien la anarquía, pues es creación; creación y azar.
Saludos

Jose Zúñiga dijo...

Vivimos tiempo de olvido, Leonardo. Y aún peor, de autocomplacencia en aquellos que antes lucharon. Sí, sigo con sed aunque quisieran robármela.
Abrazo