domingo, 31 de enero de 2010

y la gente se queja

.
Son mortaja. Las ojeras del mar de los sargazos son peces desarmados,

un recuerdo de astillas nunca fósiles. Se cierra el mar abierto,

la tierra prometida, las tablas del becerro,

el vellocino, dónde, dónde el arca.

Y dónde el paso del que escucha los golpes de la azada.


Y la gente se queja de su caja vacía.


Son mortaja, ataúd esas piernas

cuyos calambres también son o serán

pasto y recuerdo de algún ejecutado en la cárcel de Arkansas
entre aplausos y vítores de las víctimas crueles,

de los crueles verdugos, de los negros, los blancos, los presos y guardianes,

qué más da, en el revuelo qué más dará, todos somos iguales más o menos,

todos, menos cuando nacemos, que no somos iguales ni distintos aunque lloremos de forma diferente.


Y la caja se queja de su gente vacía.


Tu boca, tus arcángeles ciegos,

dónde fueron los pífanos de las puertas del cielo, de mi cielo.

Eres mortaja de todas las mortajas

sin tan siquiera huellas sobre tu manto oscuro.

Adónde llevas, dime, qué paralelos tienen tus paredes.

No hay luz aunque deslumbre tu blanca palidez.

No hay belleza ninguna en la melancolía de tus bancos.


Y la caja se gente de su queja vacía.


Tres bancos, un rebaño y millones de copas.

Ni una sencilla cúpula que tú dirías, Leilah,

lo dijo Leilah, blanca, hermosa, ella sí inmaculada:

esta ciudad ha muerto envuelta en catedrales.

No hay tristeza en su muerte, ni hay misterio.


Y la gente se queja en su caja de pino.

sábado, 30 de enero de 2010

todo a cien

.
.
Tengo una almohada verde.

Dos mariposas.

Tres vecinos.

Cuarto quesadas.

Cinco tonterías.

Seis calimochos.

Siete aventuras.

Ocho traidores.

Nueve puñales.

Diez centenos.

Once marimorenas.

Doce pajas.

Trece da mala suerte.

Catorce llagas.

Quince paredes rotas.

Dieciséis ínfulas.

Diecisiete tubérculos.

Dieciocho penitencias.

Diecinueve sentencias pendientes de cumplir en búsqueda y captura.

Veinte jirones de piel a las espaldas.

Veintiún releches.

Veintidós cementerios que me esperan.

Veintitrés aventuras por vivir o vividas que eso nunca se sabe.

Veinticuatro sandungas a la luna de ayer.

Veinticinco novelas que dejé de leer.

Veintiseis cánticos medio religiosos que son algo paganos pero míos.

Veinsiete calzones.

Veintiocho bizcochos, no diga que no es fácil.

Veintinueve te espero sentado en la escalera de mañana será.

Treinta casi no pasa.

Treintaiuna montañas de esas mágicas pendientes de escalar.

Treintaidos madreselvas marchitas en el nicho de mi abuela.

Treintaitres alcachofas en la baca del coche.

Treintaicuatro dibujos en la pared del dormitorio a medias de dormir y pintar.

Treintaicinco calambres que dan asco.

Treintaiseis yo te quiero tanto tanto mi vida.

Treintaisiete mentiras.

Treintaiocho novenas por la virgen santísima.

Treintainueve escalones.

Cuarenta muertos míos a la espalda del que tenga espaldas.

Cuarentaiun pateras costas las de levante playas las de Albacete.

Cuarentaidos extremos que velar.

Cuarentaitres veladas debajo de la alfombra.

Cuarentaicuatro limpiabotas que me roban hasta los calcetines.

Cuarentaicinco bazares de Estambul.

Cuarentaiseis estrellas de oriente o de occidente estoy algo confuso.

Cuarentaisiete cantamañanas que me dan la tabarra mientras duermo o pretendo dormir.

Cuarentaiocho sábanas de olor a barbacoa.

Cuarentainueve espíritus con tuberculosis.

Cincuenta ya lo sé.

Cincuentaiuna sabias balas babas bravas.

Cincuentaidos los tuve.

Cincuentaitres también .

Cincuentaicuatro y ahí te las den todas.

Cincuentaicinco dólares.

Cincuentaiseis alcázares.

Cincuentaisiete rabadillas.

Cincuentaiocho alcantarillas por asombro.

Cincuentainueve válgame dios.

Sesenta años.

Sesentaiuno no me los quita nadie y lo que queda.

Sesentaidos que lo baile que lo baile que lo deje de bailar.

Sesentaitres que ya me lo dirás cuando te lleguen si merece la pena.

Sesentaicuatro que me la refanfinflan.

Sesentaicinco que tendría que ser la edad de los misterios pero me da que no.

Sesentaiseis que es pura sementera a la luz de tu vientre.

Sesentaisiete que me da mucha risa.

Sesentaiocho casos.

Sesentainueve ya.

Setenta me va a dar un ataque de vacile de los que no se paran fácilmente.

Setentaiuno dice word que no existe por más que yo barrunte que tienen que existir y de hecho existen porque si no que se lo digan a mi tía.

Setentaidos las penas nuevamente.

Setentaitres la muerte de mi padre.

Setentaicuatro que te den.

Setentaicinco nunca.

Setentaitaiseis qué risa.

Setentaisiete yo te los regalo.

Setentaiocho tiene un no sé qué con un siete y un ocho.

Setentainueve sombras del ciprés la sombra del ciprés es alargada nada el jarama la caída la peste le deuxiéme sexe

Ochenta Sartre que risa con sus gafas de gafe.

Ochentaiuno como que me parto.

Ochentaidos los que se murieron y resucitaron de entre los muertos kirie leyson amen.

Ochentaitres jajajajaja.

Ochentaicuatro ya me estoy cansando.

Ochentaicinco redes más bien sin alcahuetas.

Ochentaiseis risas que pesan tanto que me hunden si remedio en el fondo del mar.

Ochentaisiete no me da la gana.

Ochentaiocho ochenta y ochos.

Ochentainueve matarile rile rile.

Noventa dónde están la llaves.

Noventaiuna la hendidura.

Noventaidos espuelas de las últimas.

Noventaitres carracas, caracolas que cuando me las pongo cerca de la oreja suenan a mar pero me engañan.

Noventaicuatro búlgaros errantes como si fueran holandeses, almejas en mi mano.

Noventaicinco ultramarinos con pimienta, sal, agua de rosas, lentejas, jabón de madreselvas, calientapollas, esparadrapos, botes de pintura y muchas cosas más.

Noventaiseis calzones colgados del tendal mientras protestan todos los vecinos de este patio que no es patio ni cosa alguna que se le parezca vaya ni por asomo y eso que nos colgamos todas las mañanas en el patio de luces.

Noventaisiete noches de colgaos, de colchas que no alcanzan a cubrir tus vergüenzas ni las mías.


Noventaiocho altares apartados por si generaciones.

Noventainueve espantos.

Cien no, no, que no voy a llegar a todo junto por mucho que me junten las estrellas y quieran estrellarme cuando aparezca enfrentre de la casa la cara de tu muerte.

No, cien no.

soflama

Te gustará saber que tengo entre los bazos brazos, brezos sarmentosos que acunan, que recogen los barquitos de vela y tres gorriones muertos de amargura sin trinos y sin tino que dejaste en su jaula entre las nubes de humo de nuestros lagrimones altaneros cuando saliste envuelta en todos los harapos que a través de los años has ido acumulando en las rebajas esas que anuncian primaveras o veranos pero no acaban de tachar la etiqueta de los muertos de hambre que se mueren sin ton ni son ni lágrimas ni moscas ni ataduras ni vendas ni alacranes ni yodo ni veneno ni alfombras ni calandrias ni nombre. Ni nombre, te gustará saber que tienen una historia que contar, que mañana yo voy a hacer que escuches entre los altavoces del metrónomo la infamia tan estúpida como que estoy saliendo de la mierda, del cubo de basura que somos, que nos somos, que nos hacen, que hacemos, te gustará, seguro que estarás encantada de morirte de asco. O al menos de morirte cuando leas mi esquela en los periódicos. Viva España.

viernes, 29 de enero de 2010

en la barra

.
Estoy aquí, sentado ante esta barra
donde ya no me queda ni un borracho
ni un sereno ni nada, ni un mal cacho
de bufanda en el cuello. Mi zamarra

de cuero gris también se ha ido de farra.
Sólo queda una rubia, un mamarracho
que a estas horas se ofrece sin empacho:
¿Un polvo, caballero? , en plan macarra.

Me miro en el espejo. Qué cansina
la mirada que miro, cuánto triste
ese fondo de armario en la retina.

Así mis noches desde que te fuiste.
Cuelgo mis huesos en cualquier cantina.
Bebo vientos de un cuerpo que no existe.

jueves, 28 de enero de 2010

La Vida Rima y su soneto semanal

El blog de LVR, bueno, su responsable, que no es otro que el bueno de Dani Orviz, además de informarnos y divertirnos con su tira semanal, ha decidido publicar sonetos con la misma periodicidad. El otro día me tocó a mí, con este texto que, aunque ya publiqué en otro momento acompañado de algunos otros, parece que tiene ahora su espacio en solitario. Seguiré mandando sonetos al blog vidarrimense, soy muy sonetero.

A LA MANERA DE SARMENTERO, POETA Y CABALLERO, por José Zúñiga.


Si quieres que lo quiera yo lo quiero
porque tienes el alma de madera,
de madera de quiero y no te quiero:
no basta decir basta a tu manera.

Hasta que no lo quieras no lo quiero
y no lo querré nunca hasta que quiera
querer como se quiere a un cenicero,
como al humo o un tuerto: una quimera.

M e alejaré de ti mientras te acercas
a las aladas almas de las rosas
que se llenan de invierno en primavera.

Seré tornillo donde tú eres tuercas.
Troquelaré tus dardos en la espera.
Lo que espero de ti son otras cosas.

miércoles, 27 de enero de 2010

en la entraña

Versos que surgieron sobre las palabras
vertidas en un comentario por Rafael Arenas

Y vuelvo a la entraña, esa entraña
que no ha visto nadie.
El fuego y el frío y el frío
y el fuego y la entraña…

Y vuelvo a la entraña.
Se esparcen cadáveres
de ciervos en la roca blanca.
Se esparcen cadáveres
de ciervos que nunca nacieron.
Se esparcen cadáveres
de ciervos apátridas, huérfanos,
ciervos ateridos,
ciervos condenados a nunca pudrirse,
a no gozar nunca la suerte
de descomponerse.

Y vuelvo a la entraña
como quien retorna
a su acogedora nada regresiva,
carne putrefacta, sólida estulticia
la nada, la nada que impide
ser hueso en la llama. Nunca llegaremos
al polvo, nunca seré polvo
vuelto al polvo, nunca.

Y vuelvo a la entraña.
Tan sólo gusanos sobre los cadáveres,
los ojos abiertos de los ciervos fríos,
los que se lanzaron, ingenuos,
a la llama ardiente
que hablaba en la zarza.

Y vuelvo a la entraña, esa entraña
que no ha visto nadie.
El fuego y el frío y el frío
y el fuego y la entraña…
¿De qué otra manera se puede
hablar de la muerte?

martes, 26 de enero de 2010

en la zarza

.
Ahora enfilo la llama,
hacia la entraña vuelvo, animal
entre los animales retorno a la caverna,
vuelvo a la entraña blanca
donde se han recogido tantos ciervos
y yo desnudo, fría tú,
piedra tú, hueso tú, sí,
alimaña entre las alimañas.

No apartes el cuchillo,
ya es la llama erección entre las zarzas.

lunes, 25 de enero de 2010

por todos los dichos

.
Parbleu!,
tremendo error,
he confundido el culo con las témporas,
me he hecho un lío
entre el tocino y la velocidad,
he madrugado
y aún estoy esperando a que amanezca,
no más pronto o más tarde,
simplemente a que salga
el sol por Antequera,
un sol al que arrimarme si resulta
ser el que más calienta,
si no habrá que arrimarse
el ascua a la sardina,
he nadado y he guardado la ropa,
vano empeño, un decir,
ni las botas me quedan
y aún ando boqueando porque no sé nadar.

Mejor me callo, digo, porque dicen
que no entran moscas si la boca cierras,
aunque digan después: si no te arriesgas
no cruzarás la mar.
Parbleu!, y a buenas horas, mangas verdes.

Y luego dicen que el pescado es caro.

domingo, 24 de enero de 2010

desavenencia

.
Después de quince años de sana convivencia
me dijo hasta mañana,
no volvió a saludarme,
tampoco dijo adiós o buenas noches,
tan sólo hasta mañana; y hasta hoy,
no volvió a saludarme,
se hizo dueña de todo,
de la casa, la cama, las ventanas,
las cenefas,
la alfombra, el desvarío,
las llaves de mi coche, eso sí me jodió,
mis ahorros en ese coche nuevo
que ella no deseaba, da igual,
se lo quedó también .

Casi pasaron otros quince años
hasta que me di cuenta
de todo, o sea, de que había
dicho aquél hasta mañana
a otro tipo, no a mí,
pensé que era un capricho de los suyos
cuando tras el saludo me dijo:
hoy duermes con el perro. Ja.

Ahora estoy con los pájaros,
salto de árbol en árbol,
bueno, si es que se puede llamar árbol
a este barbecho
en que se ha convertido el jardín de la casa,
y el perro se murió, supongo que de hambre,
de pena no, a mí no me quería; él, tampoco.

Mi ex-mujer amamanta dos o tres mamoncillos,
de dónde habrán salido, me pregunto,
los míos ya se fueron,
un muchacho solícito se acerca hasta mi rama
y pregunta sin sorna: cómo vamos.
Debe ser el amante.
Llevo bastante tiempo, ya te digo,
un tanto despistado, no me entero de nada.

sábado, 23 de enero de 2010

"Patrias Parias", mi nuevo libro en Argentina


Jose! feliz año nuevo y feliz nacimiento de Patrias Parias!!Adjunto unas primeras fotos, que saqué con mi teléfono móvil porque no encuentro ahora el cargador de batería de la máquina fotográfica, pero te las quería mostrar y decir que ya estaban..! y creo que salieron muy bien.






viernes, 22 de enero de 2010

mueren

.
Ya estoy harto
de que todos se mueran
y a los que no, los maten.



"Lo que queda" http://jlzuni.blogspot.com/

rigor mortis

.
Ahora mismo mismísimo
se está muriendo el mundo.

Ahorísima me importa
muy poco, la verdad.

Seré un tanto insensible,
ahora tan sólo pienso
en tres amigos míos
que se me están muriendo

aquí, a mi lado.

secuela manriqueña

.
.
ni todos los sauces lloran
ni viaja siempre la muerte
con guadaña
ni avisa el sepulturero
ni añoran los ataúdes
cementerios
tañen a muerto en las altas
espadañas las campanas
cuando quieren
las cigüeñas van y vienen
de París a Barcelona
en jet privado

el plomo lastra sus alas
el hatillo de sus picos
va preñado
de opúsculos fecundados
en cristal in vitro en vidrio
en castellano.


"Lo que queda"http://jlzuni.blogspot.com/

jueves, 21 de enero de 2010

Dando caña: intemporáneos

Giovanni, Hasier, Jose. Presentados por Batania, que promete dar caña.
Un limeño que se afirma en sus hondas raíces y ramifica luego sus ramas por doquier. Un euskaldun navarro que aflora en cada verso la identidad de un pueblo que vive siempre al filo. Y un cántabro que vuelve al mar desde cualquier estepa mesetaria para ahogarse o vivirse entre las olas.

Hoy, en el Entrelíneas Librebar de Marta y Richard.


Cartel: Zuri Negrín

miércoles, 20 de enero de 2010

Ada: aquí estamos

Conozco a Ada Menéndez desde hace poco tiempo. Lo suficiente para apreciarla como persona y como poeta. Porque Ada se hace querer a la primera, igual que a la primera lectura te abre las carnes en sus poemas. Me duele, me indigna y, sobretodo, me parece tremendamente injusto todo esto por lo que está teniendo que pasar. Lo sufro como si me pasara a mí.


Ada se entrega en lo que hace con ilusión, con fuerza, con valor, hasta con furia si la ocasión lo requiere. Y nunca pierde la ternura, aunque a veces pretenda disimularla. Estuve el otro día en una lectura suya junto a Santiago Tena. Puedo afirmar que allí viví uno de los momentos más intensos de entre todos los vividos en este tipo de actos, que ya llevo unos cuantos. El viernes pasado nos puso a todos con el corazón en un puño al quebrarse su voz. No hubo teatro, ni ñoñería ni leches: hubo sentimiento hondo, tanto como lo puede ser ahora su pena, tanto como lo es su persona. No se me ocurrió más que romper en un aplauso, porque si no lo hago rompo a llorar. En serio.

Ada se entrega en sus hechos, abraza cuantas causas le parecen justas, se da a los demás como pocas personas y se ofrece ella misma, con todo su desvalimiento, con toda su verdad, en lo que hace y en lo que escribe. Transmite honestidad. Así es Ada. Espero seguir leyéndola, escuchándola y queriéndola. Espero tener esa suerte. Y hoy quiero que mi entrada sea para ella. Para que no se rinda. Sólo para que sepa que yo, poco dado a efusiones, vengo aquí a decir:

Ada: aquí estamos.

Y que este pequeño aliento sea un clamor. Que todos mis alientos sean para ella. Los que me leáis, hacedlo saber aquí o en su blog: Ada, estamos a tu lado.

mi abecedario (de la T a la Z)

.
T
T
raidora.
Torcida.
Todo te lo guardas.
Todo me lo quitas.
También
tienes prisa.



U
Ursulinas urracas,
usureros ubícuos,
utensilios usados:
único. Todo es único.



V
Verter vides,
vivir vueltas,
volar vientos,
ver veletas,
ventilar vigas,
virar vestigios,
vagar vados
vacíos,
vestir virutas
velar viajes,
viajar voleas,
voltear velas.
Volver: ¿Vamos?
Vida, ven.



W
Whisky wagneriano:
wolframio y bromuro
en el Johnny Walker.


X
Xilofón.


Y
Y qué:
ya lo sabías.


Z
Z
úñiga, como suenan
zambombas. Las palomas
zurean.





martes, 19 de enero de 2010

Una sola verdad. Intemporáneos

.
Tres distintas poéticas. Tres tiempos distintos. Tres personas distintas y una sola verdad: la poesía.

Siempre me ha parecido enriquecedor integrar en un discurso variado pero articulado la diversidad cultural, generacional o, hablando de poesía, de formas y estilos. Esta es la idea de esta convocatoria. Cuando le propuse a Gio, desde estas premisas, hacer una lectura conjunta, yo creo que se sorprendió un poco, así de entrada. Sin embargo, enseguida, dio con el punto de encuentro. Cuando, después, hablamos con Hasier porque nos parecía el remate perfecto para materializar la idea que nos rondaba en la cabeza, surgió la sorpresa. O no, porque por algo nos habíamos juntado: cuando nos vimos para ver de qué iba esto pues eso, hablamos de nuestras vidas, de nuestra poesía (que es algo igual pero no es lo mismo); y descubrimos cuántas vivencias, cuántas similitudes en nuestras trayectorias, cuánto trasfondo compartido a pesar de la edad, de los orígenes, de los distintos tiempos que nos tocó vivir.

INTEMPORÁNEOS

Leo a Hasier y a Giovanni y me descubro. Quiero decir, no sólo me quito el sombrero, que también, sino que allá, en el fondo de sus versos, me descubro a mí mismo. Aquello que surgió como algo sólo intuido resultó ser una realidad tangible, palpable, palpitante. Y la vamos a hacer palabra y carne.

INTEMPORÁNEOS

Os esperamos ilusionados el próximo jueves, 21, en el Entrelíneas Librebar. Será a las 20:30 horas.



lunes, 18 de enero de 2010

hielo

.
Porque son estas noches
del diablo anfetamínico las noches
en que más nos amamos,
estas noches en que cubre la nieve
casi azul tus pestañas,
estas noches de miembros ateridos,
congelados tus dedos en mi boca,
tu mirada perdida, tus aullidos de loba,
yo hurgando en tu guarida, yo arañando
unos instantes de humedad y muerte
a esta vida de perros que llevamos.

domingo, 17 de enero de 2010

judería

somos novios
Estamos lejos, dijo.

En el momento aquel, cuando lo dijo, no era del todo falso. Otras veces, muchas veces, decía que estaban lejos y era absolutamente mentira. Aquella tarde no era tan absoluta la mentira, porque llovía, la verdad, llovía, y él estaba al otro extremo de la calle, y ella también estaba al otro extremo, pero al otro. Lejos, al fin y al cabo. Estamos lejos.

Y dijo: qué cerca estamos hoy.

Mentía nuevamente, simplemente ignoraba el puente romano, diecinueve ojos de puente sobre el Guadalquivir; ella, en la Calahorra; él, en San Rafael. Y doscientas columnas de mezquina ignorancia. Se calló, ella. Entonces los lagartos salieron del letargo y todo lo invadieron.

Dice: está muy rico esto.

Dice: toma, verás qué bueno.

Dice: somos novios.

El rayo fulgurante rompió un cielo que ya estaba bastante destrozado. Sonó un móvil. Se dio por aludido y acabóse.


casa de Deanes
Tres veces no. No, no y no. Ha sido un acto espontáneo, nunca se imaginó capaz de tal hazaña. No. Tres veces no. Lejos de aquel instante es difícil comprenderlo. Salió al patio. Corría el agua hacia el aljibe. Los tres arcos del fondo daban sombra de rejas. Los tres arcos de atrás no los veía. Del resto de los arcos, tres a cada lado del cuadrado, emanaban ronquidos y suspiros. Acercó a las macetas una silla, y acercó a la tumbona una pistola, y a la pistola le acercó una bala, y entonces sucedió. Cayó una gota, se ocultó la luna.

Quién ha sido. No hay nadie.

Sí, había alguien. Anatole France, con su inconmensurable humanidad, corrió como una sombra a través de los muros. Entonces fue cuando se hundió en el pozo la pistola, sonaron los tres cuartos en la campana de la torre y dijo: no. Y volvió a decir no. Y por tercera vez dijo que no.

Luego ladró el mastín.

sábado, 16 de enero de 2010

II Jornadas de «Poéticas en fuga». Valencia, 5 y 12 de febrero

Os dejo noticia de esta gran iniciativa.

Lecturas poéticas de Olvido García Valdés,
Chantal Maillard y Juan Carlos Mestre


Universidad de Valencia
La Nau
Vicerectorat de Cultura
Calle de la Universidad, 2
46003 Valencia
--

Entrada libre y gratuita


Primer Encuentro. Viernes 5 de febrero, de 19:30 a 21:30 hs

Mesa I: «Tendencias de la Poesía Hispanoamericana actual con nombres propios»

Participan: Marcos Canteli, Pedro Montealegre, Enrique Falcón, Ildefonso Rodriguez y Rafael Saravia.

Moderador: Enrique Falcón


Mesa II: Lectura poética a cargo de Olvido García Valdés.

Acompañan: Antonio Méndez Rubio, Laura Giordani y Eloísa Otero.

Moderador: Antonio Méndez Rubio

*Con carácter informal, a partir de las 23 hs. En el café El Dorado, los poetas Ildefonso Rodríguez y Eloísa Otero ofrecerán una lectura de sus poemas.

---
Segundo Encuentro. Viernes 12 de febrero, de 19:30 h a 21:30 hs

Mesa III: Lectura poética a cargo de Chantal Maillard.

Acompañan: Oscar Solsona, Julieta Valero y Esther Ramón.

Mesa IV: Lectura poética a cargo de Juan Carlos Mestre

Acompañan: Cecilia Quílez, Arturo Borra y Guadalupe Grande.

Moderadora: Esther Ramón.


*Con carácter informal, a partir de las 23 hs. En el café El Dorado, las poetas Julieta Valero y Guadalupe Grande ofrecerán una lectura de sus poemas.

Organiza:
Librería Primado (Miguel Morata)
Asociación Poética Caudal (Víktor Gómez)
Café Cultural El Dorado Espacio MAE (Isaac Alonso y Alicia Martínez)

viernes, 15 de enero de 2010

nana para el amanecer

(Esta nana la escribí hace más de treinta años. Ahora la he vuelto a cantar. Todo vuelve)



A la rueda rueda,
mi niña,
la luna se va.
Que despunta el alba,
mi niña,
hay que dormir ya.
Llamando a la puerta,
mi niña,
el lucero está.
Aunque va cansado,
mi niña,
te quiere arrullar.

Ya viene el lechero,
ahora el panadero,
sones mañaneros
meciéndote van.
A la rueda rueda
la niña se queda
dormida, qué buena.
A la rueda va.

A la rueda rueda,
mi niña,
la luna se va.
Que despunta el alba,
mi niña,
hay que dormir ya.

A la rueda rueda,
mi niña.

jueves, 14 de enero de 2010

ro.jo, o un poema raro

(Pu..
ayer. crucé.
sema. foro. rojo.
tú. me. di
.jiste. adi. os.
brin.qué. con
momia. vladi mir

re.di.vi.
vo. yo lo vi.

vivo. vale.



"Lo que queda"
http://jlzuni.blogspot.com/

miércoles, 13 de enero de 2010

Madrid en blanco y Leilah

Mis ojos sin tus ojos no son ojos
Miguel Hernández



Hoy leí en el periódico que un árbol centenario
ha sido derribado por el leve latido de tu aliento.

No sé quién lo plantó. El parque está cubierto
por esa blanda nieve de la tarde,
y las huellas del hombre que transita
vestido con su gorro de lana y su bufanda
y sus gafas de sol, no se ven, sólo suenan
sus crujidos de hielo.

No guardo en la memoria, por mucho que comprima
imágenes y datos, el nombre de los árboles que mueren
ni el de quien los plantó. Pero llevo escafandra,
por si acaso me pides que penetre en las aguas
heladas de tu tarde. Yo lo haría por ti.
Tú no sé si lo harías,
siempre te sumergiste a pulmón limpio
y ahora lo tienes lleno de cristales.

Y ya cuaja la nieve, y ya escudriñas
a través de la noche las vías de los trenes

o

el cauce de los ríos en la niebla

o

el armario que tienes que desmontar mañana

o

las flores que sabes que no van a brotar.

Tu mirada escudriña. Pero no son tus ojos
esos ojos que miran a los míos:
tus ojos, Leilah, que tanto me alentaban,
ahora derriban árboles y esconden madrigueras.

Pues acaba conmigo. Haz leña con mi cuerpo.
Te daré así calor y entenderemos
que ha valido la pena.

Con el leve latido de tu aliento
derríbame,  sálvame del invierno.

lunes, 11 de enero de 2010

ella (3)

.
.
Vuelvete a mí.
Cuando llegues me iré,
tanto te quiero.

---

Algunas veces
te quedas en silencio.
Muerdes las horas.

---

Tres las espinas.
Dos los cuerpos abiertos.
Uno en el otro.

---

Busco en tu orilla
el encuentro perdido.
La roca es negra.





Lo que queda:
http://jlzuni.blogspot.com/

domingo, 10 de enero de 2010

carta a una conocida


Te escribo porque está nevando y además es domingo en Madrid,
no sé en Roma o Hamburgo, aquí es domingo de tomo y lomo
y con todas las de la ley y demás circunstancias del caso
que no hacen sino agravar el paso de las horas que resbalan.
¿Recuerdas como resbala el sudor en mi espalda?,
pues así , cosas del calendario o del vocabulario,
me pregunto por qué el domingo tiene que llamarse
domingo y no viernes por decir, o gato, o saco o roto,
lo de las convenciones sociales es lo que tiene, pero bueno,
es domingo y te escribo por eso y porque nieva y qué otra cosa
puedo decirte, la situación es extrema,
las calles siguen llenas de gente, se han lanzado
al asalto de la perfumerías en pleno exceso de protuberancias,
hace un rato leía a Robert Waltser pero ya no,
he salido por piernas por si las moscas, y los gatos
en su callejón que ni maúllan, dime,
¿qué tal te va, ¿te queda piel, sombrero?, ¿tienes hambre?

Te escribo a ti, preciosa, a nadie más, a ti que mereciste
ser llamada virgen entre las vírgenes, comparto cada trago
de abismo con el profeta aquel de los leones
y contigo, no pienses que estoy triste porque nieva,
no pienses que me voy a tirar por la ventana,
se me olvidó decirte, ayer
me quedé manco por culpa de unos tristes
muertos que maté primero pero luego no,
entonces cuando recibas ésta espero que estés bien,
y ya está todo escrito, estaba escrito,
no sé por qué te escribo si ya todo está escrito.

Duerme mucho. Te llamo un día de estos, cuando escampe.

sábado, 9 de enero de 2010

... y a ti te encontré en la calle

.
Nacerse o enterrarse
son cosas serias como
para dejar que alguien
lo haga por ti:
no dejes que te nazcan,
no dejes que te entierren,
hazlo tú mismo.

---

Los vínculos de sangre
son un nudo gordiano.
Esa especie de circo
que llamamos familia
no la encontré, me vino.
En feliz hora me deshice de ella.

---

Ahora tengo a mi gente,
mis amores. Este amor tuyo
que encontré en la calle
no me mata, me vive.

---

Son un nudo gordiano,
las familias. Los vínculos
de sangre, una falacia.

Hay que sacar el hacha.
.

viernes, 8 de enero de 2010

el sanatorio del Doctor León

Me asalta
con frecuencia la sospecha
de que debo estar loco,
no loco de remate,
sólo un poco
majara, lo justito
para que me señalen
con el dedo.

Estuve
hace algún tiempo
loco no, con la depre,
y después de tres meses
de tequila,
sangre,
sudor
y lágrimas
y lavados de estómago,
me fui con esa música
a otra parte: al siquiátrico,
o sea, al manicomio.

El sanatorio del doctor León.

Fui muy feliz allí,
las cosas como son.
En realidad
la depre es poca cosa
comparado con lo que se ventila
en esas casas de misericordia,
pero yo tuve suerte,
la gente era tranquila,
amable.

Incluso a veces
me pareció en exceso
comedida.

Fueron muy pocos días.
Salí como una rosa
y así sigo,
pero quiero volver.
Y es que los cuerdos
no me gustan un pijo.

O será que son ellos
los majara.

jueves, 7 de enero de 2010

juego amatorio

.
Casi no me dio tiempo ni a mirarte.
Me quitaste sin más la camiseta,
abriste a dentelladas mi bragueta
y comiste mi polla hasta saciarte.

El polvo fue un buen polvo. Todo un arte
tus modos al cargarme la escopeta
con pólvora que embrida mas no aprieta.
Así empezó: ya sólo sé follarte.

Empolvada y con medias te poseo,
te desgarro las bragas, se derrama
mi lava seminal sobre tu boca.

Dando cumplida cuenta a tu deseo
mi enloquecido falo gime, brama,
se agita, se agiganta, apunta, emboca.

miércoles, 6 de enero de 2010

mi regalo de reyes



Voy a olvidarme por un momento de Leilah. Esta canción me la ha cantado mi chica, María Pasión para el mundo, en la noche de reyes y quiero compartirla con vosotros. Cinco minutos, ay.

Cinco minutos más vieja
y los pasé junto a ti,
cinco minutos de vida
que me diste y que te di.

Cinco minutos tan sólo,
Dios mío, ni los sentí!
Así que pasen las horas,
así que pasen los días,
así que pasen los años,
quiero envejecer a gusto.

Quiero envejecer a gusto,
envejecer junto a ti.



martes, 5 de enero de 2010

a mi manera

.
Vengo
de un velatorio
nada grave,
sólo un muerto
que me recuerda
a todos
los difuntos
que un día

se acordarán de mí.

lunes, 4 de enero de 2010

Leilah en el lienzo

En el lienzo tan blanco tú apareces
apenas enfocada,
como un punto perdido en el rectángulo.

Y eres y vas, punto final.

Tan desnuda eres tú, tanto sin nada
en las manos que tienden a ser todo,
que dejaste este charco
con mango de paraguas en la nieve.

Era un simple paraguas color rojo

pero es sangre, tu sangre derramada,
tu mirada encharcada sobre el crimen
no soporta las huellas del anónimo.

Y vas. Y estás. Punto y final.

Artesa de las lágrimas del mundo
que nunca abandonaste, hoy eres hielo,
mi Leilah acogedora.

Yo voy a plantar piedras en el páramo.
.

domingo, 3 de enero de 2010

mi abecedario (de la P a la S)

.
P
Perdición, negra suerte la mía,
me he quedado sin pilas justo ahora
que empezaba a perder.


Q
Querida mía:
que te zurza
quien mejor te cosa.


R
Rulan las aguas,
riela la luna,
rompen las lágrimas.

S
S
alvo alguna mañana
(sueles ser mañanera)
siempre andas suspirando,
siempre me dejas
sollozos en la cama:
son tus abrazos como
sangre de pato
salpicándome.



"Lo que queda"http://jlzuni.blogspot.com/


sábado, 2 de enero de 2010

una necrológica

Jeff Bernard alcanzó fama internacional en 1989, cuando Keith Waterhouse llevó su biografía al teatro con Peter O’Toole en el papel del excéntrico columnista en perenne resaca. La obra Jeff Bernard is Unwell ("Jeffrey Bernard está indispuesto", una referencia a la frecuente nota de redacción con la que The Spectator disimulaba el hecho de que no había una columna de Bernard porque éste estaba –otra vez– demasiado borracho como para entregarla antes del cierre de la edición) es un sórdido cóctel de reminiscencias del Soho y postales caóticas de una gran angustia existencial. Todas ellas con el trasfondo de un humor negro muy propio que hicieron de sus dos únicos libros, ambos sobre hípica (Talking Horses, 1987, y Tales from the Turf, 1991), una lectura obligatoria para los amantes de ese deporte y juego de azar, así como por los nostálgicos de una era de costumbres evidentemente perjudiciales pero sin duda más atractivas que muchas de las distracciones tecnológicas que ofrece el mundo de hoy.

A los pocos días de la muerte de Jeff, Santiago Segurola se explayó de lo lindo en la edición nacional de El País: “El Barça hizo caja en Mestalla con una eficacia superlativa y con un juego discretísimo. Sólo ofreció algunos apuntes al final del partido. Pero fue una aparición un poco ventajista, porque el Valencia se había autodestruido antes: en los tres goles que concedió graciosamente, en la expulsión de Carboni en el primer tiempo, en la esterilidad de sus numerosos remates”. El Valencia perdió cero a tres en su campo, y eso que estaba Zubi de portero. Para ser más exactos, la alineación completa del Valencia fue: Zubizarreta, Angloma, Cáceres, Javi Navarro, Carboni (Juanfran, m. 46), Farinós, Milla, Gerard, Del Solar, Saib y Marcelino. Pues bien, “todo lo que sucedió en el partido lo protagonizó el Valencia. Lo bueno, que fue bastante, y lo malo, que fue poco pero decisivo. Si el equipo fue generoso para jugar y tuvo recursos para tapar los agujeros de los ausentes, el Valencia fue víctima de su tendencia autodestructiva”, concluía Segurola.

Aquel mismo día, en la edición de Madrid de El País, y sólo en ésa, J. C. Gumucio firmaba una necrológica que nadie leyó, según el EGM (Estudio General de Medios). Así que ahora la transcribo, porque estoy seguro de que merece la pena que alguien la lea (no puedo estar tan seguro de que esto realmente vaya a suceder, vale). Dice:

A los adictos a la columna Low Life, el espacio que el ultraconservador semanario londinense The Spectator dedicaba a lo que queda de la antigua bohemia del Soho, no les sorprendió para nada que la última entrega de su célebre corresponsal, Jeffrey Bernard, fuera en realidad una despedida. Esta vez en serio: “La semana pasada no asistí a mi sesión de diálisis y creo que no lo haré más”, escribió Bernard. Siete días más tarde, el sábado pasado, fuera del hospital, en su propia cama, Bernard, de 65 años, pidió un cigarrillo, una copa de vodka con soda y limón y, rodeado de unos cuantos amigos, se puso a morir. Tras una vida de alcohol, tabaco, mujeres, apuestas y juerga permanente que sorprendentemente produjo un espléndido cóctel de ingenio periodístico, Jeffrey Bernard expiró no sin antes bromear que “Dios se quedará sorprendido. Voy a llegar con bastante retraso”.

“Hace ya tiempo que Bernard, el último poeta del Soho, estaba con un pie en la tumba. De hecho, sus columnas comenzaron hace tiempo a ser descritas como un suicidio por entregas. Desde que le amputaron una pierna por complicaciones diabéticas hace cuatro años, su miembro o, mejor dicho, la falta de él, le dio una veta para trabajos humorísticos a primera vista, pero seriamente ubicados en un plano filosófico y cáustico muy particular. Gran parte de sus artículos fueron concebidos en las largas sesiones diarias de alcohol en el decrépito pub Coach and Horses, de la Greek Street, donde pasó buena parte de su vida discutiendo con artistas como Francis Bacon o John Minton, o en el no muy distante y mejor dotado bar del Groucho Club, donde se le trataba como a un rey”.

“Para Bernard, la medicina era una dictadura, la generación de escritores modernos una imparable fuente de tedio y la botella y media de vodka por día, amén de sesenta o más cigarrillos, el único bálsamo contra los charlatanes. La desastrosa vida privada de este hombre de clase media que incluso mucho después de perder su aspecto de galán de cine seguía conquistando damas (Jeff tuvo muchas esposas, incluyendo cuatro propias, solían apuntar sus amigos), fascinaba a los británicos: devoraban sus columnas porque explicaban la depresión y contenían recetas para sacar el máximo provecho a la ruina física”.

Debo reconocer que como nota necrológica no está mal. Pena de necrólogos -¿necrologistas?-, que hubieran podido lucirse por entonces tanto como Santiago Segurola en sus crónicas futbolísticas. Porque en aquel marzo de mil novecientos noventa y nueve murieron, uno trás otro, Stanley Kubrick, Guayasamín, Yehudi Menuhin, Bioy Casares, Goytisolo (José Agustín) y Juanita Reina. Casi nada. La cosecha de Rioja de ese mismo año mereció el calificativo de excelente.


"Lo que queda"
http://jlzuni.blogspot.com/

viernes, 1 de enero de 2010

(re)capitulación

Será el apocalipsis,
la sinapsis
caerá
como una blanca
página madura,
se adueñará del diccionario,
serpiente, madre, hortensia,
los besos que nos dimos.

–¡No, hipérbole!, dirán.

Consentiré,
porque no están los tiempos
para hacer tonterías.


lo que queda: "http://jlzuni.blogspot.com/