jueves, 18 de marzo de 2010

flor de pino


Te dirán que me fui lejos
pero un día volveré.
Carlos Mejía Godoy


Un día volverás, como las golondrinas,
al paisaje rotundo del verano,
a las dunas, a la casa del padre,
a los frutos maduros de los árboles,
a la penumbra amable, calurosa,
de todos los agostos; en tu cuarto
verás cómo adelgazan las sombras del manzano
cuando los campanarios toquen las ocho horas,
vendrán a recogerte los amigos, salías
a divertirte, moza
que todos los arrullos del mar acariciaban,
tu piel tersa, sin mácula, tan presta
a cualquier sobresalto como ahora no.
Y luego ibais sin prisa a ver romper las olas
hasta que amanecía y quedabas dormida
en el nido de un pájaro sin crías; verás
luego una mesa con pan y mermelada
y no podrás dejar de repetirte:
vuelvo a estar en mi casa,
en casa. No me fui.

Volverás como vuelve todo lo que está vivo,
todo lo que palpita, todo lo que te nace
en los repliegues de tu cuerpo, volverás,
tú volverás un día a aquellas tardes
en que no conseguías encontrarte las venas,
volverás al asfalto, al pobre de la esquina,
cuando ya barruntabas que ahora no es el momento
de volver, volverás, al infierno, flor de pino
al amor de la hoguera. No me fui.

16 comentarios:

Rafael Arenas García dijo...

Leyéndolo he pensado que es cierto que lo de ser poeta es ver las cosas de una forma diferente. Se crea una atmósfera, un entorno, un paisaje que se puede tocar, se puede sentir, se puede compartir. La imagen justa, el tono adecuado, el ritmo que conviene... me gusta mucho.
Un abrazo.

Manolo Jiménez dijo...

Tengo la creencia que nada muere. Somos energía que simplemente se transforma y necesariamente todos volvemos. Siempre.

Abrazos.

Mayte Sánchez Sempere dijo...

Que bonito, respira por si mismo, me encanta.

Beso grande.

sus(ana) dijo...

Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar...

las aguas siempre vuelven a su cauce

un beso

sus(ana) dijo...

se me olvidó antes..

Feliz día y en tu día

Bletisa dijo...

El poema y como dice Rafael respira por si solo. Se ha independizado de tí como lo hacen los hijos bien criados, bien educados y plenos de valores.
Orgulloso estarás Zú.
Es uno de lso mejores poemas que te he leído.
Esto sobresale:
" Un día volverás, como las golondrinas,
al paisaje rotundo del verano,
a las dunas, a la casa del padre,
a los frutos maduros de los árboles,
a la penumbra amable, calurosa,
de todos los agostos; en tu cuarto
verás cómo adelgazan las sombras del manzano
cuando los campanarios toquen las ocho horas,
vendrán a recogerte los amigos...


Volverás como vuelve todo lo que está vivo,
todo lo que palpita, todo lo que te nace
en los repliegues de tu cuerpo, volverás,
tú volverás un día a aquellas tardes
en que no conseguías encontrarte las venas,
volverás al asfalto, al pobre de la esquina,
cuando ya barruntabas que ahora no es el momento
de volver, volverás, al infierno, flor de pino
al amor de la hoguera. No me fui.

Encanta de poder decírtelo.

Jorge dijo...

Muy bueno Jose; me ha encantado este poema...el ritmo, lo qué cuentas, cómo lo cuentas...Fantástico TODO.

Un abrazo, y feliz día! ;)

María Socorro Luis dijo...

Tres felicitaciones:por "santo", por padre y por poeta.

Ta hiru muxu.

Jose Zúñiga dijo...

En este caso el paisaje es levantino para más señas, Rafael. Y real.
Un abrazo!

Jose Zúñiga dijo...

Sólo el cambio perdura, Manolo, ya lo dijo Heráclito.
Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Que un poema palpite es lo mejor que puede pasar, Mayte.
Bss.

Jose Zúñiga dijo...

Bien traída la cita de Bécquer, Ana, la referencia es intencionada.
Gracias, pasé un buen día.
Bss.

Jose Zúñiga dijo...

Pues sí, Ble, de mis hijos estoy orgulloso; de mis versos (otros hijos al fin y al cabo), a veces, sólo a veces. Cuando se me desmandan, más.
Gracias por dcírmelo. Y beso.

Jose Zúñiga dijo...

Gracias, jorge, escuché esa vieja canción y me vinieron versos a la cabeza. De ahí el ritmo, tal vez.
Abrazo.

Jose Zúñiga dijo...

Santo no soy; padre, sin duda; poeta, aprendiendo el oficio.
Gracias por triplicado, Soco.
Bss muchos.

jorge dijo...

Hay lugares que al volver sientes como que nunca te fuiste.

Hay sitios que al volver te preguntas para que.

Y hay sitios de los que nunca puedes marcharte.

¿Siempre nos quedara la añoranza de la juventud?
¿A tu piel tersa, sin mácula, tan presta a cualquier sobresalto como ahora no.?