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Tu orilla me recuerda el mar, la espuma tan lejana de las olas. Me sumerjo en el hueco de tus muslos y espero la marea. Una colonoscopia me devuelve a la vida como tremendo boca a boca. Es pura biología. No sé qué hacer, me han puesto un orinal entre las manos y añoro tus caricias.
40 comentarios:
Querido agitador:
Las tres primeras palabras ya son candado para encerrarte en el resto.
¡Bien!
Una prueba que deja desvalido, buscando una mano amiga que acariciar y que acaricie.
La primera frase es bellísima.
Un abrazo.
¿Un orinal con candado? Jesús merece la palma del surrealismo :-)
Y tú eres un maestro, que lo sepas.
Un abrazo.
Pd Gracias por el comentario en cuaderna via.
Hay momentos en los que una mano, una caricia, son el bálsamo mejor de nuestras vidas, y se añoran, ay, si se añoran...
Un abrazo.
Leo
Ay!!! "Me sumerjo en el hueco de tus muslos" pero mira que eres travieso y eso que tienes un orinal entre las manos, puede haber algo más antierótico????...
Te abrazo fuerte y largo.
En estos casos de intrusión extrema mejor no pensar en nada.
Abrazos.
Caramba, caramba....este texto me deja sin comentarios.¡¡
Seguiré disfrutándolo y desmenuzándolo hasta que termine con él. Luego, si puedo, te lo comento.
Mientras la espera, puedes visitar nuestro bar o mis abrazos. Lo que más te apetezca.
chaito
Si me introduzco a ojos cerrados en tu poesía surrealista, no sé si puedo salir a nado entre blancas espumas marinas o entre azafranados y tibios orines.
Un placer leerte, querido Jose.
Abrazos.
Ante la perpectiva de tal invasion que mejor que recordar invasiones mas placenteras.
¿Y quien no querria sumergirse?
Ay,ay. Este no me convence amigo Zú.
Yo diría que son la rendija de escape, Jesús. Aunque sean las primeras palabras, ahí me escapo.
Seguimos agitando, jeje.
Abrazo
No se me ocurría mayor desvalimiento, Anabel. Y buscaba el contraste.
Bss
Pues no está mal lo del orinal con candado, Amadeus. En estos textos desenfadados (aunque no tanto) conviene apoyarse en cierto surrealismo.
Abrazo.
La cadera es la orilla, Leo. La agresión es la pérdida.
Abrazo
¿Y a mí que el orinal me trae tiernos recuerdos, Bego? Qué raro soy, en efecto.
Avhuchón.
O ponerse a escribir a modo de exorcismo, Manolo.
Abrazo.
Como apetecerme, ambas cosas Anatxu. Y la espera será larga, porque desmenuzar este texto es ardua labor.
Bs
Introducirse a fondo es peligroso, Terly; que el texto puede parecer (o ser) surrealista, pero nunca la realidad estuvo tan presente.
Abrazo
Ante tamaña perspectiva lo mejor es poner pies en polvorosa, Jorge, pero yo no sé. Mejor quedamos sumergidos.
Abrazo
Me preocuparía si alguna vez alguien me dijera que le convence todo lo que aquí pongo, arguellesacero. Ni un 1%, no se puede gustar a todos todos lo días. Ni se debe, creo.
Abrazo
prometo que te leí pero me dejaste (como a veces haces) perpleja y antes que me mandes a buscar la mecedora ya me senté en ella un ratico a mecerme
estoy en ello
Besicos
(si existe la posibilidad de huir sin duda es lo mejor )
Sin embargo yo lo siento tan real... ¿puede haber algo que te devuelva más a la realidad que una colonoscopia y que ésta te regrese y te hable de ausencias?
Los contrastes son de primeros planos de corto.
Un beso camaleónico.
Cuidado con las mecedoras que a veces no duemen sino muerden, Luisa.
Hay sufrimiento aquí. Y superación.
Bss
Ah, y se me olvida, no me gusta el significado de la palabra (demasiado escatológica), pero me encanta su sonoridad: co lo nos co pia, cuatro oes, es fantástica, me dan ganas de hacer un poema a lo Huidobro ;-P
Ya.
Ya digo, Paloma, que será o no surrealista la cosa, pero en todo caso con un fuerte sentido de algo real. Qué bien lo expresas así, con los planos cortos enfrentados en rápida sucesión.
El camaleón no duerme. Pero el próximo libro (que ya está en puertas) será férreo, lo juro. En los libros, ya sabes, soy menos juguetón.
Bss
jeje, por algo está puesta, Paloma. No se te escapa una.
Has llegado al hiperrealismo, al huaaa! del lector.
a mí, no, la verdad, estas cosas no me entusiasman me suenan a hospitales y me da cosa.
Un abrazo.
No quiero llegar a ningún sitio, mj, quiero seguir andando, recorriendo pasillos por inhóspitos que sean. Uncluso hospitalarios. Ahora recuerdo tus dos habitaciones de hospital y aquella magnífica seri de hace un mes aprox.
Pero escoerto, las cosas estan dan cosa.
Bs
Menos mal que, a pesar de todo,
siempre nos queda el mar
y la orilla.
Un abrazo.
con lo bonito que parecía el baño el principio... y luego qué ahogo. Me ha encantado.
Claro, de eso se trata, llegas al hiperrealismo y sigues, no vas a detenerte en él, al menos por mucho tiempo.
tu poema es muy bueno, yo no puedo expresar todo lo que veo en el hospital cada vez que voy, qué más quisera poder llegar a ese realismo crudo y...,y algo más
Mis entradas del hospital las recogí allí, en el hospital.
Bueno que no me ha desagradado el poema en sí, si no más bien saber que eso es cierto y entonces me digo huajjj, que cósas hay que vivir.
de vez en cuando no viene mal ese realismo y crudo y sin edulcorar.Así es la vida.
abrazo grande.
Sólo faltaba, mj, nada de explicaciones. Me recordó tu serie de poemas y ya está. Mi texto es muy mío, eso sí. Mucho.
Bss
Sí, Noray; y no quiero pecar de agorero: también los ahogados.
Abrazo.
Como tuyo, largos pies, pero en desnatado.
Bss.
Es cuando está más cerca del Infierno, cuando la idea del Edén se hace presente.
Es una forma de sobrevivir.-
Me gustaron estos fragmentos.
BESOS
SIL
No hay mejor sedación que sumergirse "en el hueco de tus muslos..." para esperar la marea.
A mi lo del orinal (he leído los distintos comentarios) me parece un crak de los buenos. Hace que uno se despierte del sueño y añore de verdad esa otra orilla, esas caricias....
Chapó.
Voy a por el segundo frgmento. Es que yo suelo ir siempre un paso por detrás. Sorry.
Siempre estamos más allá del Edén, Sil.
Bs
Por ahí van los tiros, Carmen.
Bs
Increible, pensar que una "colonoscopia", te esté llevando a la orilla y a la espuma y a pensarla a ella de ese modo.
Besos
Cosas que se me pasan por la cabeza, Mayde. Y así las viero a la pantalla.
Bss
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