sábado, 29 de mayo de 2010

seguidilla

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AVISO: Inicio una serie que etiquetaré como “ESTROFADO”. No pretendo enseñar, sino aprender y hacerlo en público. Voy a ir estudiando estrofas y haciendo diversos poemas con ellas, sujetándome a sus reglas. Desde el pareado a la silva hay mucho juego y me pienso divertir. Quien quiera sumarse al juego, encantado. 


beber los vientos
 
Cuando bebo tus vientos
soy como el pájaro:
pequeñito en la rama,
trino en el canto.

José Luis Zúñiga
---

Una mañana negra
supe la muerte
que tu desdén me daba
por no quererte.

Rafael Arenas

---

Mientras que vuelas alto,
lejos, aquí
el pájaro remoto
canta por ti.

Adolfo González

---

Sal al balcón, mi niña,
cuando anochezca
y enséñame esos ojos
que yo los vea.

Isabel González

---

Casi amor que me dueles,
no digas nada:
el viento de los mundos
se te hizo llama

Mayde Molina

---

déjame que te quiera
como tú eres:
abogado del lunes,
perito en jueves

La cónica

---

Dama cruel zalamera
de mis anhelos,
que con zalamerías
sajas mi adentro.

Montxu

---

Las mujeres y las flores
son parecidas,
mucha gala a los ojos
y al tacto espina.


José de Espronceda

(Confieso que el ejemplo comienza con un octosílabo)

(Seguidilla: estrofa de cuatro versos, dos heptasílabos (primero y tercero) y dos pentasílabos (segundo y cuarto), que riman alternos: el 1º y el 3º son heptasílabos, y el 2º y 4º pentasílabos. La rima es consonante o asonante en los versos pares (-a -a). La seguidilla se utiliza en la poesía española desde el siglo XI).


47 comentarios:

Reflexiones de Emibel dijo...

Gracias por la enseñanza que nos ofreces pero tengo una duda, explícamela por favor, el segundo no es pentasílabo, no? ¿O sí? disculpa mi ignorancia.
Un abrazo.

Jose Zúñiga dijo...

Te aclaro con gusto la duda, Emibel:

El segundo verso tiene, en efecto, seis sílabas gramaticales.

Pero el cómputo silábico, el que establece el número de sílabas del verso, su medida, longitud o metro, está determinado por muchos factores (yo lo acabo de mirar, no creas que me lo sé), y uno de ellos el acento.

Los versos cuya palabra final es esdrújula, se denominan versos esdrújulos o proparoxítonos, y su cómputo se disminuye en una sílaba. En este caso, eso es lo que pasa con "pájaro".

Si te interesa, puedes mirar aquí, aunque no te recomiendo complicarte la vida que estas cosas acacban saliendo solas:

http://universoliterario.net/silaba.htm

Bs

Jose Zúñiga dijo...

Ah, se me olvidaba. No pretendo enseñar, sino aprender y hacerlo en público. Voy a ir estudiando estrofas y haciendo diversos poemas con ellas, sujetándome a sus reglas. Desde el pareado a la silva hay mucho juego y me pienso divertir.

Esta serie la inicio hoy y la etiquetaré como “ESTROFADO”. Quien quiera sumarse al juego, encantado.

De hecho, voy a poner este comentario al comienzo de la entrada para que nadie se confunda, jeje.

HARGOS dijo...

mi querido amigo , agradezco infinitamente tu ayuda, y sabes que me gusta pasar a leerte , lo demas lo dejo para maestros, yo no sabria ni que significa lo que estas explicando, un abrazo

Sofía Serra dijo...

M encanta este "juego" tuyo. No te lo vas a a creer pero hace dos días abrí la libreta que conservo desde octavo de EGB, y que es la que siempre me sirve de guía en estas cosas, y me la puse aquí a a la izda. No, no puedo decirte que entraré al juego, ya sabes tú, no sabe una bien por donde andará, pero el otro día anduve con el zéjel, sin terminar nada concreto. El año pasado compuse con la copla de pie quebrado tras los sonetos, pero al final paré, cuesta mucho después irse de la rima, por lo menos a mí.
Ayer estuve soñando con hacer unas seguidillas, :))), ya sabes, el origen de las sevillanas. Esta tuya es preciosísima.
Mi preferida, la lira.
Y la silva, :)
un abrazo, José

Jose Zúñiga dijo...

Yo tampoco lo sé, amigo Hargos, lo voy aprendiendo (más por curiosidad que por otra cosa) segun lo escribo.
Olvídate, prefiero que me leas, si quieres, con el sentimiento, con el tuyo. Lo demás, zarandajas.
Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Da para mucho el juego, Sofía, anímate. Pero ya digo, no es la forma lo importante, sino lo que se quiere decir. Siempre hay algo oculto en laspalabras.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Bueno, Hargos, y espero que no me abandones, jeje.

María Socorro Luis dijo...

Entro en el juego, Jose,-ya que has invitado-
El segundo verso no tiene 6 sílabas gramaticales, sino 7

soy - co - mo - el - pá - ja - ro-

Muy bien explicado lo de la palabra esdrújula final, pero te has olvidado de la sinalefa mo -el que se contaría moel

Sinalefa = unión de dos sílabas en una; la última de una palabra y la primera de la siguiente, si termina y comienza respectivamente en vocal o h muda

O sea, un verso de 7 sílabas gramaticales, se convierte en uno de 5 sílabas métricas.

Ta muxus.

Jose Zúñiga dijo...

Qué bueno, Soco! En efecto, me olvidé. Aunque casi mejor, que ya bastante liosa es la explicación esdrújula, jeje. En realidad, lo que quiero es ajustarme en las estrofas, explicarlo no tanto, entre otras cosas porque no sé.
Bueno, a ver si hacemos un pareado, que es más sencillito.
Muxus

CumbresBlogrrascosas dijo...

¡Qué bonito, José! Y perdona la simpleza.

Un abrazo, Javier.

Jose Zúñiga dijo...

Es un juego, Javier, pero me alegro de que te guste. En los pequeños versos también pueden decirse grandes cosas.
Abrazo

Anónimo dijo...

¿Y si jugamos al cadáver exquisito?

:D

Yo acá me pierdo, sepa disculpar, pero si se pone la cosa más movida, yo juro que me prendo.

virgi dijo...

Imposible estrofear,
prefiero parear.
Con este chico tan majo,
es necio escribir de un tajo.
Me largo a mi cubículo,
antes de hacer el ridículo.


Por eso,
un beso.

sus(ana) dijo...

venía buscando el soneto tórrido, pero me parece que se lo llevó la pasión ;)

un beso

Jose Zúñiga dijo...

No tepierdas, Agus, te tomo la palabra para cuando se ponga la cosa más movida. Aunque tampoco abusaremos del tema, no vayamos a enloquecer.
Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Ya llegarán pareados y aleluyas, Vigi, que aunque parezcan sencillos tienen su miga, amiga.
Besos y alegría.

Jose Zúñiga dijo...

De puro calor se derritió, Ana, pero ahora, con el fresquito mañanero, ha vuelto. Más tórrido si cabe.
Y bs

jorge dijo...

Me parece estimulante ir viendo como juegas con los versos.

Seguire apareciendo para aprender viendo como aprendes.

Jose Zúñiga dijo...

Pues ese estímulo tuyo me estimula más, Jorge. Te lo digo en serio.
Abrazo

Anónimo dijo...

Yo te animo a seguir con esto, me parece muy interesante. Y lo de beber los vientos me ha gustado.
Un saludo

Maria Sangüesa dijo...

Qué buena iniciativa, José, seguro que es divertido e instructivo para todos. Muy buena puntualización de Soco, os voy a seguir con más entusiasmo todavía... Abrazos.

Rafael Arenas García dijo...

¡Diantre, Jose! No hay quien te siga el ritmo; todavía no he puesto aquí una seguidilla y ya has calzado (va sin doble intención) un soneto:

Una negra mañana
supe la muerte
que tu desdén me daba
por no quererte

Ya sé aquí también riman el primero con el tercero; pero se permite ¿no?
Un abrazo, muy divertida tu propuesta.

Jose Zúñiga dijo...

Ya sabes, María, cuando quieras jugar, juega.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Pues gracias por los ánimos, paparruca.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Según la definición va ser que no se permite, Rafael, pero la verdad es que no he encontrado ninguna estrofa canónica en que rimen , alternado heptasílabos con pentasílabos, el primero con el tercero. Misterios de la poeticología (palabro que a lo que se ve me acabo de inventar). En todo caso, bravo, Rafael!

Rafael Arenas García dijo...

Pues, nada, hay que seguir las reglas del juego:

Una mañana negra
supe la muerte
que tu desdén me daba
por no quererte

Está bien el palabro que has inventado, y el dato de que no se aprovechen las posibilidades de rima de los versos impares. Habrá que estudiarlo.
Otro abrazo, maestro.

Jose Zúñiga dijo...

Hecho, Rael. Ya está en la "antología" de esta entrada.
Abrazo. Y que no pare.

Isabel Mª dijo...

JUGANDO UN POCO A LAS SEGUIDILLAS.


Dame tu color chiquilla
que a mi me falta,
ilumíname los grises
píntame el alma


Tu amor no es de mi talla
me queda chico,
déjame volar libre
que me lastimo.


Sal al balcón, mi niña
cuando anochezca
y enséñame esos ojos
que yo los vea.

(Confieso que el primero comienza con un octosílabo)

Jose Zúñiga dijo...

Bueno, Isabel, no sabes cuánto me alegro de que te hayas animado. De momento va de estrofas, así que sólo cojo una. Luego vendrán los poemas estróficos en seguidillas, si es el caso.
Sí, como en Espronceda el primero es octosílabo. Y el tercero tuyo también.
Bs

Isabel Mª dijo...

Ah, José no van juntos, perdona la confusión. Los he improvisado un poco rápido, ya probaré con una un poco más trabajada. Me suenan alegres, con sabor andaluz,

mayde molina dijo...

Que bueno Jose, así aprendemos todos juntos. ¿Servirían por ejemplo estos?

casi amor que me dueles
no digas nada
el viento de los mundos
te hizo llama

casi amor que no eres
libertad ni luz
caricia ni fogata
crepitándola

besos!

Jose Zúñiga dijo...

Va bene, Isabel.

Jose Zúñiga dijo...

Pues la primera puede servir si añadimos una sílaba al último verso, Maude, me he permitido hacerla.
La segunda ya es otro cantar, literalmente: si te fijas bien, tiene poco que ver con la seguidilla.
Bss

Ramón María dijo...

Ahh! números y letras, ambas para servidor indomables, me quedo con intentar transmitir sin necesidad de contar....¡Sí, lo se! soy muy cómodo.

Pero me superaría sin lugar a dudas.

Un abrazo.

Jose Zúñiga dijo...

Cuenta, cuenta, Montxu, pero no sílabas, sentimientos: eso es lo que importa.
Abrazo

la cónica dijo...

déjame que te quiera
como tú eres
abogado del lunes
perito en jueves

y si no te convence
esta canción
déjame que te quiera
sin dar razón...


he leído que no valen dos, que tenía que ser una, pero en estos tiempos de crisis, lo mío es multiplicar: que si 3x2, que si 2x1...

... por lo demás, no me toquen las palmas, que me conozco, como decía aquella...

Jose Zúñiga dijo...

Lo has bordado, cónica.

Adolfo González dijo...

Acabo de ver que has pillado esa mía del blog. Una sorpresa y un placer estar ahí. Ando con un trajín tremendo y el proyecto estrófico irá más lento, aunque irá, porque soy un cabezón. Pero en principio seguiré escribiendo como siempre, de la manera que me vengan los versos, que a veces también me vienen con estrofas, ya sabes.

Jose Zúñiga dijo...

Pues así empezó todo, Adolfo, con tu seguidilla. Y pienso seguir, que ya estoy con el pareado, jeje. Una pena que te descuelgues del juguete. Pero lo entiendo perfectamente.

Adolfo González dijo...

Sí, bueno, tengo cosas a medias: una letrilla y las seguidillas como poema estrófico. Pero si me fuerzo las cosas no me salen bien, me atormento y entonces ya deja de ser juguete. Si me abandono, en cambio, es cuando me vienen versos mejores que se escriben de un tirón. De todas formas, aunque lentamente, ese proyecto de rimado seguirá gestándose. Por cierto, el año que viene -a partir de septiembre- igual me voy a vivir a Madrid, así que prepárate, que si voy es para dar mucha guerra.

Jose Zúñiga dijo...

No a la guerra.

Adolfo González dijo...

Te paso un enlace, para que pienses en eso de "no a la guerra" antes de decirlo.

http://www.elpais.com/articulo/andalucia/Agustin/Garcia/Calvo/muestra/indignacion/pasa/Irak/elpepiespand/20030328elpand_33/Tes

En fin, es una manera de hablar...Daré juego.

Jose Zúñiga dijo...

Pues sigo diciéndolo después de leer lo de García Calvo, y eso que pienso lo mismo que él, si te fjas no hay contradicción alguna.
A dar juego.

Adolfo González dijo...

Te lo iba a mandar en un e-mail porque pensaba que no verías entero el enlace por aquí. De hecho, yo no lo veo.
Ahora bien, si dar juego es dar guerra al que no quiera que juegue, daré guerra.
Me gusta tu poema de alejandrinos, transido de citas de otros (Neruda etc), como una especie de reescritura encontrada al azar mientras lo escribiste. Crear ese tipo de caos tiene sentido, o eso me parece.

Jose Zúñiga dijo...

Ya está tu seguidilla, Montxu. Luce.

Jose Zúñiga dijo...

Juegos aparte, amigo Adolfo, veo que leíste la primera versión que colgué. Te contesto en la entrada correspondiente. Ay, qué duro es el oficio de bloguero.