jueves, 5 de agosto de 2010

me pienso

.
Discutiendo con el carpintero el otro día llegué a la conclusión de que un banco con patas es como un banco sin patas. Acabé encargándole una caja fuerte.

Desde que se puso el mundo por montera vive de lenocinio en lenocinio.

Usaba tantas muletillas que cojeaba al hablar.

Tarta de queso, tarta de hojaldre tarta tatín: tanta tarta le dejó mudo.


20 comentarios:

Anonima Mente dijo...

Siempre te puedes sentar en una caja y si es fuerte y aguanta puedes invitar a más gente.

Que desmonte el mundo y lo vuelva armar, si quiere sobre su cabeza.

Supongo que su tema preferido será el taurino.

Y es que con la boca llena no se come!.

Yo me pienso un rato nada más.
Un saludo!

José María Alloza dijo...

¡Excelente! Bueno, vale…. :-)nos desvelas la transcendencia de la carpintería; que no por eso es menos alcahueta. Así está el mundo, cada día se parece más a un pudin y yo mismo no me siento nada bien….
“No puedo decir que no estoy en desacuerdo contigo; Estos son mis principios. Si no te gustan tengo otros” (G. Marx)
¡Un abrazo!

Manolo Jiménez dijo...

Siempre es mejor una caja fuerte que un banco, pero cuida que realmente sea fuerte y aguante con el peso de todos los que se vayan a sentar.

Abrazos.

Paloma Corrales dijo...

Me gustan los carpinteros que además ejercen de gurú.

… y tira otra vez porque ha perdido el raciocinio, ay qué lástima ;-)

Es una de las peores cjeras.

¿No sería tartamudo?


Beso.

Unknown dijo...

Ironicamente pero no tanto con los tiempos que corren: "siempre mejor la caja fuerte a los intereses de un banco."
"al paso que vamos, quedarán cerrados por peligro de extinción"
"terminará cojeando el alma sino la apuntala"
"mejor que hable el silencio"

Un abrazo.
Leo

sus(ana) dijo...

para mi gusto la tarta de queso, a los carpinteros ni caso

para ti un beso de verano

SIL dijo...

Qué bocados chispeantes y agridulces, me han encantado...

Beso

SIL

jorge dijo...

Gran capacidad de convencer tiene tu carpintero.

Pues yo llevo decadas y no lo he conseguido.

Eso pasa por no tener opinion propia.

Tarta de queso y hablar fluido.

emilio dijo...

Muy bueno, los banqueros a los bancos, nosotros en casita las cuatro perras en una caja... para lo que nos van a robar...

Geniales tooodas... pero como me encantan las taaaartas.... me quedo con eeeeeesa.

Abrazos
Emilio.

Ángel Muñoz dijo...

ayyyyy esa casa cojuela que anda solo cuando las pilas se gastan y toca darle cuerda, amigo zuñi, te añoro y te estimo a partes iguales.

Jose Zúñiga dijo...

La encaergué para meter lo más preciado que tengo, anónima: mis vísceras.

La calle Montera de los madriles no hay quien la desmonte.

Qué va. Son las frases hechas.

Suerte que tienes, él se quedó tarta-mudo.

Bs

Jose Zúñiga dijo...

Y otro huevo duro, Amadeus.
Esto es un camarote. O una noche en la ópera.

Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

El problema es que bancos son caja fuerte, Manolo. Y no del parque.
Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Creo que esta vez hice yo de gurú, Paloma, el carpintero me estafó.

Rima, rima, pero entre toros y putas hay una bien montada.

Y que lo digas. También va de toreo, no obstante: le pilló el toro en una media verónica parlante.

Ese el el juego palabrero, ché.

Bs

Jose Zúñiga dijo...

Digamos que las tres pimeras propuestas rozan el sarcasmo, Leo. No son chistes. La cuarta, una de esas breverías que a veces me vienen.

Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Coincido contigo, Ana: no soporto el serrín y me gusta la tarta de queso. La que hago yo, más.

Y más bss

Jose Zúñiga dijo...

Bocaítos para remover mentes y estómagos, Sil.
Bss

Jose Zúñiga dijo...

Ninguna, Jorge, ninguna: me dijo que él no hacía eso y le mandé al carajo.

Mejor para ti, debe de ser agotador.

Propia o ajena, no dice la opinión con enjundia.

Yo con la tarta de queso en la boca hablo pastoso, jeje.

Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Ay, Emilio, no me hables de las tartas que este verano me he puesto morao y a ver cómo me rebaño la barriga, jeje.

Abrazo.

Jose Zúñiga dijo...

Que me estimes me parece bien, volti, es mutua la estima. Que me añores no, porque no me he ido. Ni pienso.
Hay que verse. Abrazo.