Tomad, idos con dios: ya os he pagado,
todo cuanto os debía, quiero ahora
tan sólo estar tranquilo; ya es otoño
–estación tan propicia a los engaños–
y necesito un poco de reposo.
En noviembre se escapan de sus tumbas
los muertos que llevamos a la espalda
–a qué viene el revuelo, yo no he muerto–,
idos con dios antes de arrepentiros,
que ya no sé si tengo entre las manos,
un cáliz, un proyecto o una copa.
Idos en paz, dejad que por entero
apure los instantes, gota a gota,
que me quedan. La vida, vieja inútil,
no transige jugar con el dolor,
a la primera sangre o a la última
es un juego perdido de antemano.
Idos en paz, que no ha de salir nadie
indemne de este juego otoñal.
Herid a las abuelas y a las madres,
herid a vuestros hijos con un tajo,
que brillen sus cabezas y sus vísceras
a la luz cenital, no gana nadie,
todos saldremos arruinados. Idos.
Idos con dios y en paz, dejadme solo
amigos míos, agradezco el gesto
pero mejor sería si os largarais
para no volver nunca. La vida... Adiós,
idos con dios, creo que os he pagado
más de lo que debía: sois mis deudos
ahora.
REVISTA TURIA. Núm 152. Pág. 250 y sgtes.
Hace 2 días
3 comentarios:
Hola,
Sólo quiero dejar mi constancia de que el libro de Zuñi "Tiempo a destiempo" es un tesoro.
De los 9 que me llevé 6 han hablado, a todos les ha encantado. A los otros 3 no les he visto aún.
Un abrazo Zuñi
Aurora
Me alegra volver a verte por aquí. Tus palabras me alientan, Aurora, mucho: está bien vender libros (qué remedio), pero mucho mejor que los lean. Y si gusta, miel sobre hojuelas.
Bs
;) Un abrazo muy grande
Publicar un comentario