También hay rincones en el desaliento de algunos recuerdos. Como quiera que fuera, uno solo se vuelve multitud en ese lugar, en camarilla con la soledad.
Sin aliento me has dejado, José, siempre pensé que no se podía decir mucho en diecisiete sílabas, que tanto minimalismo era para los orientales...nada tan madrileño como Las Vistillas. Estaba equivocada. Un beso.
Gracias, María, esto de los haikus urbanos es un experimento arriesgado, así que me alegra mucho saber que, al menos para ti, he acertado con este. Mañana más. Bs.
8 comentarios:
También hay rincones en el desaliento de algunos recuerdos. Como quiera que fuera, uno solo se vuelve multitud en ese lugar, en camarilla con la soledad.
Un abrazo
Chuff!!
Hoy tu comentario supera al poema, Zen: en camarilla con la soledad es una gran imagen. Así da gusto.
Abrazo
queda silencio en la tristeza que da el recuerdo
beso
Críptica te veo hoy, Ana.
Queda silencio en el recuerdo
que da un silencio de olivo triste.
Sin aliento me has dejado, José, siempre pensé que no se podía decir mucho en diecisiete sílabas, que tanto minimalismo era para los orientales...nada tan madrileño como Las Vistillas. Estaba equivocada. Un beso.
me gusta esa plaza... y sí, tiene un aire triste, melancólico diría yo...
me gustó.
bésote
Gracias, María, esto de los haikus urbanos es un experimento arriesgado, así que me alegra mucho saber que, al menos para ti, he acertado con este. Mañana más.
Bs.
Un comentario de la gran Marta! Melancólico, sí. Es tiempo de melancolía.
Un día de estos me paso a por el bso
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