viernes, 17 de diciembre de 2010

coplas a la muerte de mi gata (R)

.
… cómo se pasa la vida
tan callando.
Jorge Manrique


a veces las cosas pasan
y se quedan para siempre
sanguijuelas
pegajosas en los sueños
cansinos deshilachados
de los viejos
que no tienen otra cosa
buena o mala que soñar
suelen ser
cosas banales sin sustancia
insustanciales
crónicas entre las páginas
de sucesos de un diario
de provincias
ayer murió fulanito
hijo (el padre
sigue vivo todavía)

pero no
              esta casa está vacía
de recuerdos
de volúmenes al cubo
de basuras
de maullidos y meadas
que alegraban el encierro
sin futuro
de mi vida mortecina
sin caricias ni arrumacos
ni más polvo                    que los polvos
de talco
ni más anhelo
que el sofá desvencijado
empelusado
con los rastros de su pelo

mi buena gata Felisa
mi gata persa hoy ha muerto
o tal vez no
dicen que los gatos tienen
no sé si cortas o largas
siete vidas
y yo sólo viví seis
                             con ella
tal vez sólo se ha perdido
como se pierden cosechas
en verano
con la furia del pedrisco

devolverle la bonanza
a esta casa hoy tan sombría
es vano empeño
espero
            sin esperanza
estas oscuras estancias
reino ayer de cardamomos
oro y plata
de golpe se han hecho rancias
negras son como los lomos
de mi gata

Este jardín agostado
ayer
         vergel en verdor
será su tumba
ya nuestro tiempo ha pasado
todo a nuestro alrededor
se nos derrumba
queda escrita aquí la historia
de un amor hecho pedazos
sin remedio
aquí empieza la memoria
de mi dolor
                   los retazos
                                      de mi tedio.





28 comentarios:

Luisa Navarrete dijo...

que ya sé que es repe, pero hoy yo me miento y me cuento que es poema nuevo..... son mentirijillas de las que no hacen daño y plagan de sonrisas ;)

Y me quedo con ese sofá empelusado y ese hueco de maullidos.

Besos y gatos

ps jjj me encasquillé en ese saludico que eso de oirme por las ondas me ha dejado de lo más flipada ;)

Laura Caro Pardo dijo...

Muy original tu despedida gatuna.
Como siempre, diferente y muy tuya.
Un besazo, Zú.

SIL dijo...

Tu copla es el epitafio más hermoso que he leído.
Tiene todo.
Nada sobra.


Qué don el de los poetas, mi querido Jose, de tornar bello el espanto, de sembrar con palabras el vacío, de adornar la muerte mucho más que con marchitas flores.

...como se pasa la vida
tan verseando...

Gracias, POETA

SIL

Anónimo dijo...

comprate un perro

Jose Zúñiga dijo...

Pues avanti con besos, gatos y perros, Luisa.
REpe, sí, pero cortado.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Mía es, laura, nunca tuve gatos, ni gatas, ni ná. Es lo que tiene la poesía, que sirve para sacar cosas ciertas de historias inciertas.
Bs

Jose Zúñiga dijo...

Mi epitafio tal vez, Sil.
Bss

Jose Zúñiga dijo...

Mejor me compro un anónimo, suelen ser gratis, Manrique.

Paloma Corrales dijo...

Al igual que hiciera Manrique en su día, y a pesar de que Felisa nunca haya exisitido, te ha servido para hacer una buena reflexión sobre la vida y el paso del tiempo, creo que es una constante en tu poesía. Me ha encantado, Zuñi.

Besazo.

Jose Zúñiga dijo...

La muerte, el tiempo, Paloma. Ya podemos ironizar, pero son los grades temas. Con el amor, que es tiempo y vida y por lo tanto muerte.
Bs

María Socorro Luis dijo...

Los datos también merecen coplas - a veces -
Beso gatuno.

María Socorro Luis dijo...

los datos no, los gatos.

Ka dijo...

Cuan presto se va el placer jajajaj
gracias amigo de verdad
un abrazo
Juan

jorge dijo...

Pues si no has tenido gato lo simulas muy bien.

Los persas son preciosos.

Yo tuve una siamesa, "miranda" la llamaba y a veces vernia (solo cuando le apetecia).

Y tu epitafio me hubiera servido.

Meri Pas Blanquer dijo...

La grandeza de la poesía es justamente esto, imaginar un dolor por ejemplo y plasmarlo en el papel y que todos nos emocionemos.

Gran poema.

Isolda Wagner dijo...

'Aquí empieza la memoria de mi dolor, los retazos de mi tedio' Me gustan como epitafio. Mientras sigas componiendo canciones como Gatos y besos, te queda un rato, amigo.
Mil besos, con el olor de los versos y añado, de las coplas.

Jose Zúñiga dijo...

Pues fíjate que a mí lo de los datos me gustaba, Soco...! Tengo que hacer una copla a la estadística.
Muxu

Jose Zúñiga dijo...

Un poema imprescincible el manriqueño, Juan. Creo que sin ese precedente la poesía en castellano sería muy otra.
Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Pues que sea en honor a Miranda, Jorge.
Abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Gracias, Meri Pas, creo que sí, la poesía debe expresar y, si puede, transmitir sentimientos, pero no autobiográfías necesariamente.
Bss

Jose Zúñiga dijo...

Así que eras tú la del olor a los versos, Isolda! Menos mal que la tenía a mano... y encima me hiciste estornudar. Otra vez entras en directo y así charlamos, jeje.
Aquí seguimos, enjaretando nuevas canciones. A ver qué sale.
Bs

virgi dijo...

Oigo un maullido de felicidad.
Esa gata está orgullosa de ti.
Eres un sol, hasta con los mininos.
Besos

Jose Zúñiga dijo...

Los mininos y lo mínimos son algo especial, Virgi.
Bs

Unknown dijo...

Me ha gustado mucho este poema, José, llamémoslo epitafio, despedida, el tiempo fuera del alma , el alma perdida en el tiempo... sé sólo que que me ha emocionado, y a pesar de estar perdido, en los versos me encuentro. Casi siempre.
Un abrazo.
Leo

Ángel Muñoz dijo...

que bueno era esta copla cuando la leí en la anterior ocasión en tu blog zuñi, que grande.

Jose Zúñiga dijo...

Qué tiempos, Volti! Buscando esto me topé con algún "callejero", habrá que retomarlos.
Abrazo

Leonardo dijo...

¡cómo se llega la muerte
tan maullando!
abrazo

Jose Zúñiga dijo...

Araña la muerte, Leonardo.