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ahora está el horizonte fugitivo
y a través de tu cuerpo se ve el mar,
finalmente cautivo en tu mirada
acuática.
Tú nada afirmas,
tú no niegas nada.
Se extienden por mi cuerpo los abrazos,
se multiplica el pálpito. Escueto amanecer.
REVISTA TURIA. Núm 152. Pág. 250 y sgtes.
Hace 4 horas
33 comentarios:
la ola te la hago yo ;)
aunque estés de Indiana Jones en busca de tu que se yo, sigue siendo una gozada pasar por tu casica
Besicos con conservante (pa que no se ajen )
Tiene el cabello negro
y los ojos que, desde ahora, son mis ojos.
Despierto y la contemplo,
o tal vez duermo y sueño
al filo de su cuerpo.
Juan Domingo Argüelles
Solo pensar que con la llegada de la claridad y plena luz, un cuerpo se llena de abrazos, aumentando la emoción y la conmoción es muy emocionante, a pesar de la inexpresión...
Me gustaron mucho estos versos.
saludos
que te envuelvan y te arrullen las olas del tiempo
Y te ha salido un caligrama que nos ha acariciado a todos...
Y éso que no somos arena , eh!!
Un beso, Poeta.
SIL
ahora está el horizonte fugitivo
y a través de tu cuerpo se ve el mar,....
Se extienden por mi cuerpo los abrazos,
se multiplica el pálpito.
Que bonito Zú.
Más que una ola, parece una flecha con rabito de amanecer, pero directa al corazón.
Versos en forma de olas.
Algo parecido nos hemos dicho alguna vez, pero no está de más repetirlo: qué placer haberte conocido, saber que en la red de blogger, tan dada a crear mostruitos en la imaginación de muchos, cuento con la amistad de alguien normal al otro lado.
Y qué buen poeta eres, coño.
Un abrazo.
Bueno, realmente, como dice Bletisa, además de olas pueden parecer otra cosa, pero eso es bueno.
A lo mejor se pueden poner los versos de izquierda a derecha sin ir de arriba a abajo. Así sí que quedaría completamente como un caligrama en forma de ola. El caso es que se titula "olas" y olas he visto.
Desde el primer verso, José, nos haces sentir la sensación de las olas en las orillas del mar, ese horizonte fugitivo es un deleite.
Y no resulta solo escueto, dirla que es un delicioso amanecer.
Un abrazo.
Leo
Siempre saben a poco los amaneceres como ésos...
Me encanta tu osadía en las formas.
Un abrazo, Zúñiga.
Una flecha de olas hacia el horizonte.
Besos
Me gusta el mar cautivo en la mirada, invoca el agua y sugiere la inmensidad indeterminada.
Sin afirmaciones ni negaciones ¿qué queda? ¿el vasto territorio de la duda?
Besazo.
Preciosa esta caricia marina.
Un abrazo.
Qué lindo, Jose
Estas olas, sí que me gustan muchísimoo
besos
¡Qué suave oleaje que envuelve! Una delicia.
Besos
Eterna imagen del mar que no nos deja; las palabras no pueden más que volver a esas aguas que nunca son las mismas pero son el mismo mar, y pienso que a menudo nos damos contra las rocas. A veces me digo que necesitaríamos otro mar para que también la poesía empezara un nuevo amanecer. Pero la magia del mar sigue operando y no nos cansamos. Me quedo con la segunda parte, más fresca, el poema palpita aquí.
Cuídate
Con esa mirada no hace falta que afirme o niegue.
Maravillosa sensación debe ser una mirada, que ni niega ni afirma, y sin embargo abraza en un palpito multiplicado.
Un abrazo.
Ya estoy casi de vuelta, Luisa.
De abrazos y de olas, Lemaki.
Bs
Ya me vale, volti, mientras no me arrastren con ellas...
Ondulante la caricia, suave la orilla, Sil.
Bs
Cuando te leo estas cosas me derrito, Ble.
Bs
Eso por encima de todo, Adolfo: la transparencia.
Gracias, amigo.
Olas serán, y enamoradas.
Otro abrazo, Adolfo.
Esa sensación placentera me dictó los versos, Leo.
Abrazo
Creo que en el fondo soy aún más osado, Laura.
Bs
Tal cual, Virgi.
Bs
Ya sabes, Paloma: vivo en la duda. Vivir es dudar.
Bs
Gracias, Anabel.
Bs
Ay, Ana, esa sensación tuve.
Bs
Al mar y al amor siempre se vuelve, Leonardo. Y cualquier nuevo amanecer de la poesía será bien recibido, aunque dudo que no trancurran por sus aguas olas y amores.
Abrazo
Acuática, Jorge. ¿Triste?
Abrazo
Las miradas calladas suelen ser un clamor, José María.
Abrazo
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