A qué mirar, a qué mirar el cielo
cuando puedo mirarme en tus pupilas.
Aunque tiene sus riesgos:
cuántas veces he visto las estrellas
por no mirarte a tiempo o mirar con desgana.
Duele mucho.
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Recuérdame
como un árbol batido,
como un pájaro herido,
como un hombre sin más.
Labordeta, mi amigo.
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Labordeta, mi amigo.
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42 comentarios:
Sí que duele...
Me encantan estos breves que son tiernos y profundos como lo eres tú.
Besote
¿Duele mucho?
Si miras con desgana te lo mereces.
Mas. si es mejor mirar esos ojos que las estrellas.
vaya si duele !
Besico
Corré el riesgo...aunque duela.
A juzgar por el brillo que se adivina en esas pupilas, vale la pena.
Beso, Poeta.
SIL
¿ Y cuando llegamos a tiempo a algo? Lo que alcanzamos hoy se nos escapó ayer.
Un abrazo.
Mirar las estrellas. Ver las estrellas. Que cosas tan distintas, ahora que caigo.
Nos acompañamos, de nuevo, en el sentimiento.
Levantemos esta rubia a su salud y recordemos el ejemplo que les dió a esos personajes que dicen llamarse políticos.
Su mirar nunca se veía desganado.
Y siempre llevaba su poesía en la mochila.
Un abrazo hermano,
Kike
No sé de quién hablas, pero hay gente así, son faros que guían en las noches oscuras…
Un abrazo.
No puedes con el ingenio... con ese poder de arrancar sonrisas...
Muxus.
Me uno a ese sentimiento por Labordeta, "el hombre"
Vaya, me has hecho ver, que a veces, duele dejar pasar la oportunidad de ver la gloria celestial delante de nuestros ojos. Gracias por tu poema y por el otro día, un saludo...
A veces mejor correr el riesgo, aunque , como diría John Lennon: "... cuando los sentimientos finalmente se expresan te hacen llorar, es simplemente eso."
Un abrazo.
Leo
Duele... verdad. Pero me ha encantado leerte hoy.
(Aunque las estrellas de este lado del mundo, tarden un poco más en salir...)
wow esta genial
me gusto
En Aragón estamos un poco mas tristes y un poco mas solos. Descanse en paz el poeta.
Qué hermosura...
llegar a tiempo, hay que llegar a tiempo y mirar con muchas ganas, las estrellas del cielo y las de los ojos ;)
Besos, feliz día
Ver las estrellas en las pupilas del otro...me encanta.
Me uno a tu recuerdo de Labordeta, un hombre honesto y cabal.
Un abrazo.
Hay riesgos excesivos (aunque no lo parezcan) y por eso el dolor es penetrante.
Tu brevedad hace crecer la intensidad.
Beso.
Ps. Labordeta nos deja apenados, pero quiero cubrir esa pena pensando en su gran legado.
Me encantó José, Porvocas un cambio brusco de tono, he acabdo con una carcajada. Besos
Creo que Labordeta, por su obra por su legado, no quería tristeza en su adiós y sí poemas, sí sonrisas, sí ver las estrellas en dónde realmente están: en los ojos de otra persona.
Abrazos.
Tierno seguro, Bego, no me duelen prendas.
Sé que lo sabes, que duele.
Achuchón.
Lo que duele es precisamente eso: el reproche, el dolor de quien no se siente mirado, Jorge. Ya lo creo que duele. Por eso ves las estrellas. Por no mirarlas.
Abrazo
Y eso que tengo suerte, Uff: no me dan con el palo de la escoba!
Bs
Procuro no correr ese riesgo, Sil: si miro, miro. Pero si no aciertas, ay...
Bss
En este caso siempre es tarde. Aquí no hay tiempo a destiempo que valga, Laura.
Bs
ésa es la idea, paparruca.
Bs
Brindé en la noche, Kike. Y escuché sus canciones. Y me volví a emocionar con ese "ya ves".
Amigo, le digo. En años mozos compartí escenario con el abuelo. El año pasado lo saludé en Clamores (una de sus últimas actuaciones) y fue tan entrañable...
Saludos en la pena. Y alegrémosnos, que nada se gana.
Abrazo
Puedo hablar de alguien en concreto o no, Amadeus, la idea es lo que cuenta. Hay miradas que matan, pero otras te hacen ser.
Abrazo
Me puede, Soco, me puede lo de acabar los versos con media verónica. Qué le vamos a hacer, debe de ser mi estilo.
Un riconcito (tímido, pudoroso) para el hombre que nos cantó y contó. No quise más.
Muxus
Hola, Juanjo! Agradezco tu comentario, que así te ficho (ya lo he hecho).
Te lo dije y te lo repito: me gustó tu poesía. Ahora ya sé dónde tengo más.
Abrazo.
Siempre lo corro, Leo. Y, or suerte, pocas veces veo las estrellas (en esa acepción de la expresión...)
Abrazo
Las estrellas tardarán un poco más, pero también se quedarán más rato, amiga Pé.
Me hace ilusión verte por aquí. Tendré que ser más diligente, porque te leo, pero no dejo huella. Esto va a poder conmigo.
Bss
Gracas, Gamiel, me alegro de tu visita y agradezco tus palabras amables.
Abrazo
Creo que en muchas partes, Sara, aunque en Aragón duela más porque siempre fue maño hasta el tuétano.
Bs
Con las de los ojos me bastarían, Mayde. No siempre se consigue, claro.
Bs
No se puede perder de vista dónde se ponen los pies, porque se corre el riesgo de dejarlos en el aire mientras los ojos obnubilados miran hacia otros ojos.
Breve, irónico, y ese remate final, alejado, aislado y brevisimo...duele, vaya que si duele...
Un abrazo.
Es que es algo encantador, Anabel.
Mi recuerdo, en un rinconcito, sin molestar, para siempre.
Bs
Iba de pura lírica becqueriana, Isabel, pero al final la pluma siguió escribiendo y se quedó en poema pelín mordaz. Si es que no sé escribir lindo.
Bs
A veces hasta sobran versos, Paloma.
Y a veces, también palabras de sentimiento. Así es.
Bss
Pues yo también lo creo así, Manolo, el poema lo quise hoy liviano. Y el luto en un rinconcito.
Abrazo
Bueno, mj, tampoco se está tan mal flotando. Pies, para qué os quiero.
Remate escondido, pudor sin más.
Bs
Ay, ay....sí que duele, sí.
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Adios, compañero Labordeta, árbol fuerte y frondoso cargado de palabras y verdades.
Un besazo
Y que el dolor nos dé fuerza, Marisa.
Bs
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